He ido a la playa, he visto las fotos y los resultados me han llevado a inscribirme un gimnasio. Los primeros 3 días los supere gracias a un antiinflamatorio que tiene efecto 24 horas. Al cuarto día trate de controlar mi euforia y le he preguntado al entrenador que me ayude con esas maquinas que parecen de la época de la inquisición. Me fue mejor, ahora voy frecuentemente y cada vez descubro un nuevo personaje, eso me distrae mucho: La señora deprimida que sienta en la bicicleta con los brazos cruzados y mira por arriba de los lentes como diciendo "ojala se hundan todos"; la chica hiperquinetica que parece que derribara la elíptica; la que habla siempre por teléfono, el señor de cabello anaranjada observador de chicas y cualquier otro carácter por descubrir.
La verdad que el gimnasio me divierte y seguro lo hará por algún tiempo mas, muchas endorfinas creadas por "ejercicio vigoroso" y "risa".
22/4/10
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
que bien!me gusta mucho leerla
Publicar un comentario